Ante la difamación sufrida, los Concejales que integramos el Bloque “Raúl Ricardo Alfonsín” queremos decir lo siguiente:
1) Los difamadores son hartos conocidos por los vecinos de la Capital y no justamente por sus ideas y proyectos, sino por sus nefastas e inescrupulosas prácticas. Son estos mismos que pretenden desde la bajeza, la improvisación y la mediocridad volver con esto a nefastas prácticas del pasado. Sin embargo, la historia reciente de la política les ha demostrado a estos vulgares personajes que la sociedad los rechaza.
2) Se nos acusa de zamoristas, cuando presentamos más de 700 proyectos, de los cuales 80 se refieren a las tropelías que cometía Julio Alegre que nunca tuvieron eco ante la negativa del bloque del Frente Cívico que respondía al pie de la letra a las directivas de Alegre. Cuando fuimos quienes denunciamos penalmente a Julio Alegre, en la más absoluta soledad, mientras otros que se decían opositores miraban para otro lado. Y continuamos hoy denunciando permanentemente todas y cada una de las falencias y desmanejos que se producen en la gestión del actual intendente. No somos ni zamoristas ni zavalistas, somos santiagueños que nos debemos a la gente.
3) Asimismo se evidencia que el autor del cobarde panfleto, no trepida en utilizar elementos provengan de donde provengan, y es así que pretende justificar sus falsedades en las dos mentiras escritas por Julio Alegre, cuando se nos acusa de devenidos en zamoristas y en cuanto a la aprobación del presupuesto municipal al que siempre rechazamos y nunca aprobamos. Sera casualidad? o será que Marcelo Lugones es atacado arteramente por estos nefastos personajes por el simple hecho de estar liderando todas las encuestas para Intendente en las próximas elecciones.
4) No debemos permitir que estos VANDALOS DE LA POLITICA, pretendan enseñar a las generaciones venideras sobre cómo hacer y entender la política. Tuvieron en sus manos el poder e hicieron de las INSTITUCIONES, grandes placeres personales y familiares.
5) Hoy la viejas prácticas políticas ya no tienen cabida, la gente le dice basta a los agravios, a las descalificaciones, a las falsas imputaciones, y a las denuncias públicas carentes de pruebas que luego son negadas en los estrados judiciales.
Respondemos al cobarde panfleto generado por estos inmorales, porque las personas honradas merecen ser reivindicadas y desagraviadas de estos personajes que han convertido la política en sus propios bolsillos personales. Desde ese cinismo vergonzoso y corrupto tiene la desfachatez de actuar como jueces de la moral ajena.
BERTA T. DE PADILLA - ROBERTO G. LLANOS - Ing. MARCELO LUGONES
Continuar Leyendo...
Volver al Resumen...