Invitado por la Fundación Cultural Santiago del Estero, Marcos Aguinis visitará el 28 de septiembre la provincia por la que siente mucho cariño. Según explica, llegar a la “Madre de Ciudades “ “es como ponerse en contacto con el nacimiento de nuestra Patria”. En su obra La gesta del marrano, el renombrado escritor investigó profundamente sobre Santiago del Estero y sus alrededores, debido a que el protagonista, que vivía en el siglo XVII, pasó un par de veces por esta ciudad a la que Aguinis describió sobre la base de estudios exhaustivos que hizo de ese tiempo, especialmente sobre el panorama de la ciudad y la vida cotidiana en ella. “Vuelvo con mucha alegría y espero saborear algunos de sus ricos tamales y conversar un poco con la audiencia que es muy curiosa, lúcida y que me permitirá explicar un poco mejor el contraste que hay entre dos tradiciones, la colonial, que tenía algunos pocos aspectos buenos y muchos negativos; y la tradición ilustrada con la cual ha entrado en colisión y que hasta el presente siguen impidiendo que la Argentina se decida por cuál camino tomar, si el de los países exitosos o el de los países decadentes como el del chavismo venezolano”, explicó. Para Aguinis, Santiago del Estero es una provincia que se caracteriza por rasgos que tienen la mayor parte de las provincias del centro y norte argentino, “con pocos habitantes, que se han empobrecido, donde la mayor parte de la población aspira a tener un cargo público en vez de atreverse a correr el riesgo de emprendimientos competitivos, privados, que le permitan un éxito más importante”. “Justamente –agregó-, el cargo público ha generado una tendencia muy negativa porque ha quitado ambición a la juventud, que en lugar de estudiar y de prepararse para una vida llena de progreso y de expectativas altas, se resigna a tener un sueldo del Estado, a ser un burócrata, y con eso armar una familia y tener un modesto hogar. Creo que estas provincias están sufriendo algo que no merecen porque la potencialidad que existe en Santiago y en muchas de las provincias del interior es muy, muy, grande y se desaprovecha justamente por esta cultura equivocada de resignarnos a ser solamente empleados públicos”.
Fuente: diario El Liberal
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